sábado, 18 de julio de 2009

Empieza con Ce.

Esa era quizás una tarde normal, sentada a mi lado y contemplándome.
Fue entonces un instante, breve como el suspiro que me vació el ser, cuando lo vi.
Decir que era un monstruo sería descortés, pero fue como me sentí, porque era grande,
y más poderoso que yo. Me controlaba, era inevitable, me tomó de la mano y lentamente me llevó.
Te vi sonriendo. Por alguna razón en mi interior había un susurro que me hizo sentir extraña.
Pronto el monstruo aplastó con todas sus fuerzas ese camino de ladrillos rojos que estábamos construyendo, redujo a escombros lo que nos unía a través de la distancia...
Seguías sonriendo, y no podía imitarte. Me dolía y mis ojos se llenaron de lágrimas que pesaban.
Volví mi espalda hacia atrás y los escombros seguían allí, lo siento cariño pero no puedo seguir con esto.

No hay comentarios: